Antes de enfermarse, estaba llena de vitalidad y siempre en movimiento, como tantos otros niños. Creció en un hogar lleno de amor. Era cariñosa, divertida y alegre.
Un día, Zoey tropezó mientras jugaba. Perdió el control de ambas manos unas semanas después.
Cuando la familia de Zoey notó que algo andaba mal, la llevaron de inmediato al hospital.
Al llegar, oyeron algo que les quedará grabado para siempre y les dejará un mensaje que jamás olvidarán.
El médico les informó que su querida hija, llena de vida y amor, tenía DIPG, un tumor cerebral raro y grave. No sabíamos qué hacer ni adónde ir. Nos dijeron que era prácticamente una sentencia de muerte”, explicó su madre, Casey.
Una tragedia y una pesadilla que jamás se le desearía ni al peor enemigo caerían sobre la familia.
Pero lograron mantener la calma y esforzarse por ser resilientes por el bien de Zoey. Zoey se sometió a numerosos tratamientos contra el cáncer durante los dos años siguientes.
La familia encontró un centro de radioterapia en Alemania donde Zoey evolucionó bien. Pero finalmente, dejó de responder.
Rápidamente comenzó a sentirse peor. Cosas impensables estaban a punto de ocurrir.
El 4 de julio de 2018, Zoey falleció en paz en su hogar estadounidense.
Sus padres sabían que podrían compartir unos últimos momentos hermosos juntos, a pesar de que su familia estaba inevitablemente devastada por su inminente muerte.
Hasta sus últimos minutos, Zoey continuó compartiendo alegría. Sus padres pidieron a todos los familiares y amigos que volvieran a casa para verla antes de que fuera demasiado tarde.
Ahora, su madre ha decidido valientemente compartir el último momento de la familia en Facebook.
“Lo compartí porque, aunque es un momento doloroso, es un momento hermoso para nosotros”, mencionó Casey.
La foto muestra a mamá y papá abrazando a su preciosa hija.
Se habían sentado en el sofá con el perro de la familia. Pasaron el día cantando canciones de Disney. Una película de Harry Potter estaba en la televisión. Y en medio de la paz y la calma, Zoey desapareció repentinamente.
El mundo aprenderá sobre Zoey. Seguiremos retribuyendo y compartiendo amor y luz al mundo, ya que ella nos ha dado tanto.
Después de aproximadamente la mitad de la película, el corazón de Zoey dejó de latir.
“Había visto a varias familias compartiendo momentos y al principio no pensé que lo compartiría. Pero pensé: ‘Quiero una foto así’. Quiero capturar esos momentos para poder recordarlos para siempre, incluso cuando mi cerebro ya no esté”, explicó.
En la página de Facebook Zoey’s Light, la familia ahora quiere difundir la esperanza y la luz que Zoey brindó al mundo tantos años antes de su muerte. Quieren que Zoey inspire a otros a ayudarse mutuamente y a amarse plenamente y con gratitud, un día a la vez.
Lo que Caseby y Ben experimentaron, ninguna madre ni padre tendría que pasar jamás.
Casey y Ben, han sido los padres más maravillosos del mundo. Mis oraciones continuarán por siempre. Zoey es ahora un ángel que nos cuida a todos.
Descansa en paz, querida Zoey.